Un largo camino por transitar

28 de junio de 2012

 Mas allà de que anoche no se pudo jugar debido a la alta humedad que afectò el piso del gimnasio, quedan algunos puntos, transcurridas 12 fechas, para analizar todo lo que viene, y que deja en evidencia un camino larguìsimo y tremendo si, como todos desean y en principio estàn dadas las condiciones, se busca lograr una de las 4 plazas que otorgan un pase a la C en 2013.
   Primeramente, Midland, salvo una hecatombe desproporcionada, està clasificado a la segunda fase. Los primeros cuatro de cada zona (16 equipos en total), jugaràn una fase todos contra todos desde agosto hasta octubre, con varias jornadas semanales de dos partidos. Actualmente, con el invicto de 12 encuentros, el funebrero solo podrìa perder el primer lugar a manos de El Palomar, quien anoche volviò a ganar (76-65 a Ramos Mejìa) y mantiene sus expecativas intactas de terminar en lo màs alto de la tabla con un palmarès de 10-2. De allì para abajo, emerge un grupo numeroso de 5 equipos con 6 derrotas (las victorias alternan entre algunos que aùn deben partidos), por lo que debido a los enfrentamientos entre si, no màs de dos instituciones podràn ganar todo lo que resta, y el resto debiera esperar que Midland caiga en 9 de los 10 encuentros que le faltan. Una utopìa, por cierto, de allì que ya es uno de los que deben mirar la segunda etapa y enfocarse en ella, tomando toda esta segunda rueda de la fase inicial como banco de pruebas para todo lo que està por venir.
   La segunda fase constarà de 16 equipos divididos en dos zonas de 8 cada una. Desde la Federaciòn aùn no pudieron informarme si las mismas estaràn integradas por planteles de dos zonas designadas, o si iràn a un sorteo que determine la conformaciòn de las mismas. Si se designa previamente, Midland competirà con los 3 que lo acompañen mas los 4 que emergeràn de zona Sur o Norte (de Centro es poco probable, porque armar un grupo con equipos de norte y sur serìa engorroso por los traslados de los equipos, con distancias siderales para este torneo). Sean quienes sean, la ùnica certeza es que deberàn disputarse 14 partidos ida y vuelta, y conseguir uno de los cuatro lugares que dispondràn un pasaje a la tercera etapa donde los 8 mejores equipos competiràn en un impresionante raid de 14 cotejos para conseguir uno de los ansiados cuatro lugares para la C. Si bien es futurologìa, en esa tercera etapa, los que terminen del 5º al 8º puesto, disputaràn un reclasificatorio con los cuatro primeros de la zona Repechaje con el objetivo de pelear en play offs con los que zafen del descenso directo de la C y lograr con desventaja deportiva un lugar por el ansiado ascenso. Masacrante, si sacamos nùmeros ràpidos y vemos que Midland aùn le quedan 10 partidos de esta fase, mas 28 en las etapas futuras si como ahora, se mantiene en puestos de vanguardia, sino debiera sumar un mìnimo de 6 partidos màs en play offs de repechaje. 
   Caris se halla en lo que resta ante un dilema de difìcil soluciòn. Por un lado, sabiendo que perdiendo 4 o 5 partidos la clasificaciòn ya està sellada, podrìa ir armando un conjunto que aprenda a jugar sin Leandro Portillo, ya que el MVP de la competencia en agosto partirà para jugar Liga Nacional o TNA (salvo que desde la instituciòn armemos un lock out asi postergamos el inicio de la competencia nacional 3 meses y lo disfrutamos en instancias decisivas: total, el campeòn ya se sabe que es siempre Peñarol...). Pero, tambièn es entendible que el tècnico quiera, mientras lo tiene, disfrutar al màximo del jugador, porque es innegable que su presencia potencia a sus compañeros y los despoja de inhibiciones, descargando en su emblema todas las presiones asomadas en los partidos. Lo que si asoma como definitivo es que cuando se peleen por los porotos que llevan al ascenso, Midland debe jugar sin su estrella, por lo que desde ahora hay que aprovechar este banco de pruebas de 10 encuentros para ir buscando alternativas viables con el fin de que los rivales por ahora desconocidos de las otras zonas mantengan su respeto por el funebrero, aùn a sabiendas que se presentarà sin la màxima atracciòn de la competencia. 
   Los primeros que deben mentalizarse de ello son los propios jugadores; son varios los que me han contado de su certeza que sin Portillo, son un equipo terrenal en la D, y que deberàn adaptarse a tomar decisiones en instantes àlgidos de partidos cerradìsimos en canchas tortuosas (de hecho, en algùno de otra zona hubo que retirar al pùblico por lo complicado que resultaba su presencia cargosa y terminar el cotejo a puertas cerradas). A favor, es que el funebrero està compuesto por muchos jugadores avezados, experimentados y que  no se asustan por climas adversos; sin dar nombres para no cometer injusticias, uno tiene la tranquilidad de que verà perder a Midland pero porque el rival hizo las cosas mejor, y no por apichonamiento propio. Otro punto favorable es que los nuestros meten tranquilamente de local un centenar de personas, cosa muy difìcil de hallar en la mayorìa de las canchas, por lo que juega con una localìa fuertìsima lo que le da una plataforma sòlida a sabiendas que obteniendo algunos partidos a domicilio, las clasificaciones siempre lo van a tener de protagonista principal. Y un tercer punto favorable que cuenta a tìtulo personal: despuès de ver a algunos de ellos definiendo un ascenso en un marco tan extremadamente adverso como Burzaco en 2009, no me cabe duda que ya tienen el alma macerada para salir victoriosos en cualquier escenario.
   ¿En contra? tal vez cuando mencionè la seguidilla de partidos (de mìnima, 38 en 22 semanas), observar la capacidad fìsica del plantel cuando se deban disputar dos cotejos en apenas 48 horas, con viajes que podrìan (de acuerdo como va desarrollàndose la competencia) indicar un traslado a Cañuelas e inmediatamente otro a Tortuguitas. Cierto, los demàs deben venir a Libertad, pero acà detallamos como responderàn nuestros jugadores cuando tengan sobre sus lomos una treintena de partidos con la carga emocional de sostenerse sin profundos baches para no quedar al margen de los puestos de vanguardia, y con ello, el dolor de ver escapado el ascenso. Si el DT logra sostener una base fìsica en sus dirigidos, si consigue amalgamar el enorme caudal de inferiores con sus experimentados para mantener la frescura en mentes y cuerpos del plantel, Midland seguirà siendo uno de los candidatos y atracciòn por todo Buenos Aires con un equipo altamente competitivo. Es largo el camino, muy largo, pero nuestros muchachos son hoy por hoy, los màs aptos entre los 40 equipos, para obtener el ansiado pasaporte a la C.






Con la chapa del poderoso

19 de junio de 2012


   Gèlida la noche, pero se justificaba salir de casa y escaparse hasta Pontevedra, donde el local Cepa recibìa al encumbrado Midland, en el marco de la 12ª fecha. El anfitriòn esperò este partido con la certeza de saber que estaba en desigualdad de fuerzas, pero aùn asì, con la convicciòn de ser siempre un hueso duro de roer para los de Libertad; de hecho, mas de una vez en otras ocasiones, se enfrentaron con pronòstico a priori favorable al actual puntero, y sin embargo los puntos de la victoria viajaron a las alforjas del vecino. Anoche pareciò que la sorpresa decìa presente, aunque finalmente los dirigidos por Patricio Caris ajustaron desacoples del primer tiempo, y liquidò al equipo conducido dentro y fuera del rectàngulo por su estandarte Martìn Revello, 95-67. De este modo, continùa la marcha triunfal del Funebrero, en una zona altamente competitiva, manteniéndose en la cima con el margen necesario por si asoma algún traspié sorpresivo. Para que ello suceda, debe ocurrir lo que se vio esta noche, pero durante 40 minutos: que el rival se despoje de los complejos por estar frente a un equipo poderoso en la divisional, y que Leandro Portillo, el MVP de la Federaciòn juegue en un nivel para este nivel. Porque mientras sucedió esto, Cepa leyò bien el partido, trasladò rápidamente el balòn merced a la juventud de sus integrantes, aprovechando que Midland no bajaba inmediatamente luego de apostarse en la llave rival, por lo que el tanteador, salvo escasas oportunidades, favorecía al entusiasta local. Para tener nociòn de la disparidad de fuerzas, Cepa necesitò jugar seriamente, muy digno y a la vez  que la visita mostrara bajos porcentajes de tiro externo (apenas dos triples en los dos primeros cuartos), y un Portillo con escasos 6 puntos. Aùn con èste còctel, el local  fue al descanso largo apenas una unidad arriba, 37-36, luego de perder el primer parcial 13-12 y con la sensación que apenas ajustara Caris las clavijas de un funebrero apàtico, acorde con el clima de la noche, el cotejo cambiarìa rápidamente de rumbo.
    Y fue asì nomàs. No pasaron màs de dos minutos del tercer cuarto, Midland pasò al frente con una luz de 4 puntos y ya jamàs pudo Cepa seguirle el ritmo a un equipo sòlido, que imperceptiblemente va minando las fuerzas del opositor de turno, y termina  ganando los cotejos con una luz en los resultados que a los ojos de los espectadores (40 aproximadamente anoche) cuesta percibir, porque asoma en escala invisible hasta que el tablero indica guarismos mayores a los 10 puntos y ya los cotejos dejan de ser parejos.
   Y claro, el mejor jugador de la competencia podrá estar en nivel inferior al normal un tiempo entero, pero con un cuarto y medio le resulta suficiente para masacrar cualquier oposición. Entrò al tercer cuarto con apenas tres dobles convertidos, se retirò del rectángulo faltando 6 minutos con 33 unidades en su cosecha personal… como lo definió un compañero a la salida del club visitante: “es un animal, no se còmo definirlo”. Y si; Leandro Portillo eleva el nivel de la competencia, dignifica su profesión, porque ante un rival dificilísimo en las marcaciones, con métodos muy rudos y al lìmite del reglamento por momentos, no eleva su voz, no provoca a los contrarios, se la banca y responde con lo que que màs sabe: bàsquet del bueno. 69-56 terminò el penúltimo parcial, y con el resultado puesto, Cepa bajò los brazos, y si se extralimitò en ciertas faltas, fue màs por impotencia que mala intención, porque no pareció desde la postura de su líder deportivo el deseo de ensuciar el tràmite. Finalmente, el 95-67 rubricò el paso soberbio de Midland por territorio vecino, acrecentar su gallarda marcha y esperar por su próximo rival en casa, con la intención de seguir paseando su chapa de candidato. Y deleitar a propios y extraños con un jugador de Liga Nacional.

Cepa: Olmos (12), Revello Marcelo (4), Paz (4), Revello Martìn (17), Sanhueza (0), Vivero (2), Quiroga (0), Fortete (3), Lucero (2), Arequipa (14), Pate (0), Nieva (9). Total: 67

Midland: Quiroga Lucas (3), Pacheco K. (4), Quiroga Lautaro (4), Lopez M. (14), Tirelli M. (0), Rosa J. (3), Pàjaro G. (9), Lòpez S. (7), Araujo C. (1), Pèrez N. (13), Guerra C. (4), Portillo L. (33). Total: 95

Triunfo para estar alertas

16 de junio de 2012
   Comenzò la segunda rueda, y Midland visitaba a uno de los rivales que lo tuvo contra las cuerdas en el inicio de este camino soberbio, Bomberos Matanza; si hasta el propio entrenador me manifestò en la semana su precauciòn por el encuentro debido a lo duro que habìa sido ganarles tras estar contra las cuerdas a escasos  segundos aquella fecha iniciàtica en Libertad. Anoche, màs allà de un primer cuarto adverso, donde lo perdiò 18-11, nuevamente el Gran Candidato impuso sus condiciones, y terminò liquidando el pleito 76-65, acumulando su undècima victoria en igual cantidad de presentaciones. No se jugò bien, segùn comentaron algunos jugadores, pero ahi radica quizàs el mayor talento de este grupo homogèneo: no pierde los partidos aùn no jugando como puede y debe; pero es saludable que los mismìsimos integrantes del plantel no queden obnubilados por las victorias y sean conscientes de que jugando asì, el invicto puede cortarse en cualquier momento, y probablemente no venga mal para ajustar detalles y sacarse (si es que existe) la presiòn por un rècord que ya tiene ribetes històricos para la insituciòn. 
   El lunes sigue el raid por el oeste, contra un Cepa resucitando gradualmente tras un comienzo a puras derrotas. Esa levantada, mas la potenciaciòn lògica de todo clàsico, indica un choque bravo. Y alli estaremos.