Despuès del parto que significò la victoria en Claridad, vino bien el parate programado por la federaciòn, porque asì permitiò seguir amalgamando el funcionamiento colectivo de un equipo con muchas caras nuevas. Y este nuevo Midland anoche saliò airoso en casa derrotando a un Nolting que en la previa parecìa menos de lo que mostrò, muchìsimo menos en cuanto a virtudes tècnicas, pero supliendo eso con un corazòn generoso que impidiò un floreo funebrero, aunque el triunfo finalmente por 71-60 jamàs corriò peligro màs allà de algùn susto promediando el cotejo pero nunca corriendo de atràs. Asì entonces, el equipo de Libertad cosechò la segunda victoria en igual cantidad de presentaciones y deja abierta la ilusiòn a futuro en un año que si 2012 mostrò una competencia feroz en las instancias decisivas, este año no le va en saga, por lo que se torna indispensable ir fogueando este plantel con vista a esos meses tremendos, donde ¡58! equipos buscaràn el pasaporte a la C. El oeste està mucho màs parejo esta temporada, con ocho instituciones pugnando por pasar de ronda, algunas de ellas fusionàndose con planteles que el año pasado defendìan otra camiseta (de hecho, los de Ciudadela tenìan en sus filas algunas caras con pasado previo en Bomberos Matanza); o sea, salvo alguna rara ocasiòn, difìcilmente se vean goleadas obscenas, de allì que deberà ponderarse victorias como la de anoche, resultado oscilante en la mayor parte de los 40 minutos en la decena de puntos favorable a Midland. Bueno, casi 40, porque el juez principal decidiò dar por finalizado el cotejo cuando restaban 45 segundos, tras una penetraciòn de Adriàn Quiroga cortada casi al lìmite del reglamento por un rival decidido a cumplir a rajatabla la orden de su entrenador de marcar duro, cortando todo intento funebrero y especular con triples salvadores que contradijera la tendencia que primò toda la noche. Se entendiò el enojo de Nolting, pero esos segundos finales no cambiaban el rumbo del tanteador y si, se entraba en terrenos pantanosos innecesarios donde uno o màs jugadores podian sufrir expulsiones condicionantes a futuro en una primera fase donde cada partido serà clave con vista a la clasificaciòn. Decisiòn acertada entonces del àrbitro, y aplausos de las 100 personas que dijeron presente en las tribunas a un plantel en vìas de aceitamiento colectivo, por la demostraciòn sòlida hasta ese pitazo final.
Todo arrancò con un primer cuarto determinante, un 27-17 que le permitiò a Midland moverse sin desesperaciòn en el resto del encuentro, aùn cuando la visita amagò con amargar el debut en casa, pero allì afloraron las diversas armas con que Patricio Caris cuenta este año para afrontar un torneo largo. Su cinco inicial mostrò a Hernàn Adamoli en la base, con el mencionado Quiroga de escolta, Adriàn Carmagnola de alero y dos postes haciendo el trabajo sucio bajo las llaves, Federico Piquin y Agustìn Di Domènico; equipo dinàmico, quizàs por momentos pasado de revoluciones en el traslado, pero como eje positivo el no buscar casi como recurso excluyente el tiro de 3 (12 intentos en toda la noche, con un 25% de eficacia). En esta ocasiòn, esos primeros 10 minutos Carmagnola se cargò el equipo al hombro (lo vi varias veces defendiendo los colores de un equipo en una liga zonal, y jamàs en esas ocasiones notè tanto su protagonismo como en estos dos partidos en la casa donde se criò y formò como jugador: los cuatro años fuera de la Primera le devolviò las ganas de mostrar todo su bagaje tècnico y anìmico y lo transforman en un pilar fundamental de este equipo, tanto, que Pato lo sacò recièn de la cancha cuando todo estaba liquidado a falta de 2:24), con 9 puntos, 4 rebotes y dos robos; bien secundado por Hernàn (su trabajo fue creciendo a medida que transcurrìan los minutos jugando en nivel superior el segundo tiempo) y el otro Adriàn ("es vivo Chocho, supo de entrada que si no se ponìa las pilas, le iba a costar encontrar lugar en este equipo, y està jugando en gran nivel, se preparò fuerte en lo fìsico", me comentò alguien que lo conoce desde hace años).
El segundo parcial mostrò a un Nolting que ajustò esa marca zona y personal porque de lo contrario retornaba a Ciudadela con una goleada en contra, y le fue bien, ademàs de que a Midland se le cerrò el aro, y no hallò el modo de perforar la red visitante. Fueron bien contenidos los postes (el ingreso de Martìn Augusto fue un modo de cambiar la ecuaciòn que primaba en ese instante pero tampoco pudo), y el ingreso de Cristian Bernardo (gran figura ante Claridad) no trajo lucidez en el traslado; el partido se tornò feo, y tras un minuto pedido por los visitantes, metieron un parcial de 5-0, acercàndose a un 27-22 inquietante, no solo por la distancia exigua sino por no hallar respuestas en el goleo. Por eso, no le quedò alternativa a Pato de pedir minuto tambièn, seguir rotando la banca y ahi si, cuando solo restaban 3:39 para irse al descanso largo, la primera conversiòn local, meter un parcial de 8-0 tranquilizador que ni siquiera ese triple sobre la chicharra de Nolting logrò alterar.
La segunda mitad mostrò el oficio del funebrero, manejando maduramente la ventaja que siempre orillò los 10 puntos, disimulando la floja performance de algunos jugadores y no permitiendo atisbos de sueños visitante. De hecho, cuando el tablero mostrò un 56-51 (fruto casi excluyente de un suplente de Nolting que la rompiò en ese segundo tiempo), un triple del recièn ingresado Gastòn Pàjaro y una penetraciòn de Adriàn Quiroga puso las cosas en su lugar y ya jamàs se pasaron apremios. Asì las cosas, con todo definido, los de Ciudadela quisieron poner pimienta en una noche tranquila, llegando el desenlace mencionado al principio de la crònica.
Un triunfo sòlido, con un Carmagnola en nivel excelente, un conjunto que ofrece un juego ràpido y desde donde creo, ganarà muchos partidos por menguar las energìas de quienes se pongan enfrente (Claridad puede dar fe de ello) y las esperanzas firmes, aunque sin euforias: esto recièn empieza.
Para los melòmanos de Libertad, ver a Leandro Portillo sentado en la banca, ya disponible para jugar cuando Caris lo decida (tras su paso por el Torneo Federal), y a Santiago Juarez en la tribuna (la està rompiendo en Las Heras, en la divisiòn B, jugando 35 minutos por encuentro, invicto por el momento) es un bonus track al hincha de siempre. Un hijo pròdigo que rechaza ofertas tentadoras para jugar con sus amigos y un pibe que en dos años nomàs, dejò una marca indeleble en el club en el ùltimo gran equipo de Midland. Este promete emular cosas de aquel, pero es prematuro y no està bueno subirse al tren demasiado ràpido.
Midland: Hernàn Adamoli (15), Adriàn Quiroga (8), Adriàn Carmagnola (22), Federico Piquin (14), Agustìn Di Domènico (4) F.I. Cristian Bernardo (3), Martin Augusto (0), Sergio Piquin (2), Juan Rosa (0), Cristian Guerra (0), Nahuel Pèrez (0), Gastòn Pàjaro (3). Total: 71 DT: Patricio Caris
Todo arrancò con un primer cuarto determinante, un 27-17 que le permitiò a Midland moverse sin desesperaciòn en el resto del encuentro, aùn cuando la visita amagò con amargar el debut en casa, pero allì afloraron las diversas armas con que Patricio Caris cuenta este año para afrontar un torneo largo. Su cinco inicial mostrò a Hernàn Adamoli en la base, con el mencionado Quiroga de escolta, Adriàn Carmagnola de alero y dos postes haciendo el trabajo sucio bajo las llaves, Federico Piquin y Agustìn Di Domènico; equipo dinàmico, quizàs por momentos pasado de revoluciones en el traslado, pero como eje positivo el no buscar casi como recurso excluyente el tiro de 3 (12 intentos en toda la noche, con un 25% de eficacia). En esta ocasiòn, esos primeros 10 minutos Carmagnola se cargò el equipo al hombro (lo vi varias veces defendiendo los colores de un equipo en una liga zonal, y jamàs en esas ocasiones notè tanto su protagonismo como en estos dos partidos en la casa donde se criò y formò como jugador: los cuatro años fuera de la Primera le devolviò las ganas de mostrar todo su bagaje tècnico y anìmico y lo transforman en un pilar fundamental de este equipo, tanto, que Pato lo sacò recièn de la cancha cuando todo estaba liquidado a falta de 2:24), con 9 puntos, 4 rebotes y dos robos; bien secundado por Hernàn (su trabajo fue creciendo a medida que transcurrìan los minutos jugando en nivel superior el segundo tiempo) y el otro Adriàn ("es vivo Chocho, supo de entrada que si no se ponìa las pilas, le iba a costar encontrar lugar en este equipo, y està jugando en gran nivel, se preparò fuerte en lo fìsico", me comentò alguien que lo conoce desde hace años).
El segundo parcial mostrò a un Nolting que ajustò esa marca zona y personal porque de lo contrario retornaba a Ciudadela con una goleada en contra, y le fue bien, ademàs de que a Midland se le cerrò el aro, y no hallò el modo de perforar la red visitante. Fueron bien contenidos los postes (el ingreso de Martìn Augusto fue un modo de cambiar la ecuaciòn que primaba en ese instante pero tampoco pudo), y el ingreso de Cristian Bernardo (gran figura ante Claridad) no trajo lucidez en el traslado; el partido se tornò feo, y tras un minuto pedido por los visitantes, metieron un parcial de 5-0, acercàndose a un 27-22 inquietante, no solo por la distancia exigua sino por no hallar respuestas en el goleo. Por eso, no le quedò alternativa a Pato de pedir minuto tambièn, seguir rotando la banca y ahi si, cuando solo restaban 3:39 para irse al descanso largo, la primera conversiòn local, meter un parcial de 8-0 tranquilizador que ni siquiera ese triple sobre la chicharra de Nolting logrò alterar.
La segunda mitad mostrò el oficio del funebrero, manejando maduramente la ventaja que siempre orillò los 10 puntos, disimulando la floja performance de algunos jugadores y no permitiendo atisbos de sueños visitante. De hecho, cuando el tablero mostrò un 56-51 (fruto casi excluyente de un suplente de Nolting que la rompiò en ese segundo tiempo), un triple del recièn ingresado Gastòn Pàjaro y una penetraciòn de Adriàn Quiroga puso las cosas en su lugar y ya jamàs se pasaron apremios. Asì las cosas, con todo definido, los de Ciudadela quisieron poner pimienta en una noche tranquila, llegando el desenlace mencionado al principio de la crònica.
Un triunfo sòlido, con un Carmagnola en nivel excelente, un conjunto que ofrece un juego ràpido y desde donde creo, ganarà muchos partidos por menguar las energìas de quienes se pongan enfrente (Claridad puede dar fe de ello) y las esperanzas firmes, aunque sin euforias: esto recièn empieza.
Para los melòmanos de Libertad, ver a Leandro Portillo sentado en la banca, ya disponible para jugar cuando Caris lo decida (tras su paso por el Torneo Federal), y a Santiago Juarez en la tribuna (la està rompiendo en Las Heras, en la divisiòn B, jugando 35 minutos por encuentro, invicto por el momento) es un bonus track al hincha de siempre. Un hijo pròdigo que rechaza ofertas tentadoras para jugar con sus amigos y un pibe que en dos años nomàs, dejò una marca indeleble en el club en el ùltimo gran equipo de Midland. Este promete emular cosas de aquel, pero es prematuro y no està bueno subirse al tren demasiado ràpido.
Midland: Hernàn Adamoli (15), Adriàn Quiroga (8), Adriàn Carmagnola (22), Federico Piquin (14), Agustìn Di Domènico (4) F.I. Cristian Bernardo (3), Martin Augusto (0), Sergio Piquin (2), Juan Rosa (0), Cristian Guerra (0), Nahuel Pèrez (0), Gastòn Pàjaro (3). Total: 71 DT: Patricio Caris
1 comentarios:
*** perdon y los jugadores de midland donde estan ??? hay ex palomar, ex unitarios, ex paso del rey y EX PADUA ??? y los del club donde estan...... no se deberia llamar midland, en verdadero midland es el funebrero a de la liga gutierrez, esos son de midland.... que trizteza
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