Otro Midland

21 de noviembre de 2013
   Como dicta el viejo refràn: "Muerto el Rey, ¡què viva el Rey!". Desde todos los sectores del equipo, entendieron que la partida de Pato le daba un aire a un Midland enfrascado en reproches, abulia tàctica y recelos mutuos entre jugadores y entrenador. Por eso, cuando se estaba al borde del abismo, el Funebrero sacò su vieja estirpe, desempolvò su mìstica y con eso le bastò para sacarse de encima a un equipo menor en categorìa y altura, pero con un jugador como se vio pocos por Libertad. Era èl contra todo Midland, y solo èl dejò incertidumbres sobre si los muchachos podrìan meterse en cuartos de final, porque colectivamente, no habìa punto de comparaciòn entre un equipo y otro.
   Anoche, ante casi 200 personas, se vio un Midland nuevo, como si se hubiese hecho un lifting emocional y tàctico, y asì mostrar una cara sòlida, granìtica y en pleno alza justo cuando se necesita este estado para afrontrar el ùltimo escollo que significa el GEI, para lograr el anhelado ascenso, postergado desde 2009. Como me dijo un jugador en la madrugada, cuando los ànimos ya estaban templados, y se pudo analizar el cotejo "tuvimos actitud durante los 40 minutos, no aflojamos, y fuimos conscientes de que jugando asi, le podemos ganar a todos". Y asi saliò a la cancha, y veo en esto el mayor mèrito de Juan Rosa, tomando el rol de conductor desde la banca; no voy a hacer juicios de valores, acà lo importante es que el grupo està juramentado en lograr el pasaporte a la C, y desde esa perspectiva, no me voy a concentrar en hablar sdobre lo que ya pasò, y a la vista està màs que claro que fue lo mejor para todos. Jamàs cruce una palabra siquiera con Juan, pero eso no me va a impedir decir que en pocos dìas, le devolviò una imagen al equipo de soberbia colectiva, haciendo unos cambios tàcticos que los propios jugadores venìan pidiendo desde hace mucho, y que el ahora jugador-entrenador entendiò inmediatamente. Los resultados estàn a la vista: de una derrota dolorosa en casa, se pasò ante el mismo rival a dos victorias con inmensa autoridad, reduciendo a su rival a depender exclusivamente de una noche iluminada de su escolta.
   Cuando la semana pasada me dijeron que un jugador del plantel serìa el Dt en esta recta final, pensè automàticamente en Adriàn Quiroga, principalmente por el ascendiente que tiene como capitàn, y sobre todo, por su trabajo post derrota ante Claridad, que trajo la primera crisis interna, instante donde Caris debiò viajar a otra provincia por asuntos familiares luego de una victoria ante Centro Español con un plantel reducido ante el arreglo de varios jugadores de no estar presente allì. En esos dìas, Chocho se encargò personalmente de hablar con cada uno de sus compañeros, explicarles que eran necesarios en una estructura donde todo estaba dado para que cada uno tuviese su rol de protagonismo en la cancha, y asi pudo rescatar a casi todos los jugadores para ir a Moròn y conseguir un triunfo sufrido. Pero esa noche vi rostros relajados, sonrisas, y comprobè la impronta de Adriàn como ascendiente. Si Midland està en esta instancia crucial, no puede dejar de mencionarse aquella semana como fundacional  pero la dejarè cuando haga el anàlisis una vez concluida la temporada.
   Ahora, Juan cumpliò con su rol y lo primero que hizo es dar un mensaje que no hay ningùn salvador, que son 11 jugadores que deben trabajar colectivamente por el bien primario del equipo. Y buscar en cada uno las potencialidades que pueden ser beneficiosos para el conjunto. Por eso, uno de los cambios màs dràsticos y beneficiosos, fue inculcarle a Federico Piquin que sus casi dos metros sirven como alero por su talento en ver y diseñar jugadas, pero hoy es mucho màs productivo como 4-5, y no dejarle toda esa responsabilidad a Agustìn  Di Domènico, hacièndolo jugar los 40 minutos, cansàndolo innecesariamente y llegar a los momentos decisivos sin aire. Acà Federico fue definitivamente el poste, con Adriàn Carmagnola saliendo un  poco màs, no fajàndose de entrada y con eso, cargàndose de faltas en el primer cuartop. Verlo anoche con la ùltima pelota en sus manos, fue alentador, porque el entrenador supo administrarle minutos, sacarlo cuando vio que se embalaba y apelar a la banca larga con sabidurìa, no como elementos salvadores cuando la mano viene cambiada, sino como soluciones para que el trabajo en conjunto no decaiga en ningùn momento.
   Otro de los cambios positivos, es que no apelò a la costumbre al momento de sacar un cinco inicial. De verlos todo el año en todos lados, ya sabìa deantemano como formaban, y en el inconsciente de algunos jugadores, eso tambièn conspiraba en su contra, porque hiciesen lo que hiciesen, tenìan sus minutos asegurados. Acà, Juan mostrò un quinteto distinto, ademàs de comprobar la respuesta que me dieron cuando preguntè si Adriàn serìa el DT ("a Chocho no podemos dejarlo fuera del equipo, porque es el ùnico que puede calmar a Hernàn cuando se le salta la cadena dentro del rectàngulo"). Y asì fue nomàs: si bien Hernàn Adamoli fue el base, Adriàn fue quien bàsicamente en momentos determinantes trasladaba el balòn, y decidìa la jugada final. Nuevamente veo el vaso medio lleno: Chocho sabe que si se equivocò en algunas decisiones cruciales (caso Varela Juniors), va a reparar eso con su estirpe de lìder y cargàndose toda la responsabilidad en cancha. Para eso, su juego no demuestra desbordes emocionales, ni utiliza su talento para jugadas de fantasìa, solo se dedica al lucimiento de sus compañeros. Con una doble base sòlida, un Sergio Piquin encargado del trabajo sucio marcando a la figura rival (lo logrò en San Fernando, anoche le costò màs, pero hizo al pie de la letra lo impuesto por el entrenador) y los dos postes (Carmagnola y Piquin), Midland mostrò en cancha un equipo temible, que saliò a comerse crudo a su rival, no dejarle siquiera salir del estupor inicial por ver una tribuna como no veìa desde aquel partido ante El Palomar en 2009, con gente incluso mirando el partido desde la puerta porque no habìa lugar en las gradas, y desde el inicio mismo, sacar distancias en el tablero que a la postre fueron indescontables para soñar con otro batacazo. Como me dijo Matìas Tirelli, que estuvo presente en San Fernando, "ellos perdieron la serie allà, los vi muertos cuando Midland ganò el lunes, estaban confiados que lo liquidaban en su casa", y fue asi nomas, porque si ese escolta autor de 36 puntos estaba en una noche mas normalita, Midland lo ganaba por 30, porque no hubo equivalencias colectivas. Y se celebra entonces que ante las puertas de la consagraciòn, Midland muestre su mejor cara. Encima con el tècnico y asistente del GEI en las tribunas, tomando nota de lo visto, y seguro diseñando los cruces que comienzan la semana pròxima en Libertad. Serà fundamental llenar de nuevo el gimnasio, cantar y gritar como se cantò y gritò anoche, porque se notò que eso a los jugadores les insuflò un ànimo distinto, jugaron concentrados y a la vez con la tranquilidad de un respaldo externo que no habìan tenido en todo el año.
   Hablando de respaldo, otro mèrito de Juan fue traer del ostracismo a Gastòn Pàjaro, y devolverle el rol que tuvo en el ùltimo ascenso, cuando de la mano de Gabriel fue el goleador de ese equipo, y ademàs utilizàndolo para otras funciones donde es un especialista ("Gastòn es un jugador que difìcilmente salga por 5 personales, porque sabe muy bien que la falta que te saca no es la quinta, sino cuando cometès la primera", me decìa en aquellos años Seminara, cuando justamente le comentè sobre una  que hizo en una noche èpica para Midland en Ituzaingò ante su pròximo rival, cuando le copò no solo la cancha sino las tribunas y se trajo un triunfo descomunal). Anoche se vistiò como en sus viejas galas, sabièndose importante, y nuevamente el mèrito al DT, que apelò a la vieja mìstica del Funebrero, terminando el partido con referentes del club (los Adrianes y Gastòn), ademàs de los hermanos Piquìn, que le dan un plus de jerarquia notable al plantel.
   Fue una noche donde ninguno de los diez que ingresaron desentonò: Cristian Bernardo fue una pesadillla con su tiro externo para no dejar nunca soñar con una remontada al rival (3 triples); Lautaro Quiroga definitivamente se convierte en el base natural del plantel, aunque por ahora lo haga desde la banca, pero dispone de varios minutos para llevar calma y traslaciòn correcta al balòn, y encima, se le abre el aro y mete dos bombas muy festejadas (especialmente la primera, con el sonido d ela chicharra en el aire para cerrar el primer cuarto con una ventaja tranquilizadora de 12). Incluso el ingreso de Matìas Lòpez se dio en el contexto de darle aire a los titulares e ingresar con esa funciòn y cumplirla correctamente.
   Ganò el Fune, y solo està a un paso de ascender. Lo que se viene no es fàcil, de hecho, en el ùltimo cruce definitorio ante ellos, en 2011, la clasificaciòn se fue a Ituzaingò, aùn con desventaja de localìa, como ahora. Su entrenador sabe que cuenta con un plantel menor a Midland, pero està haciendo un trabajo interesante en ese club, rodeando a muchos juveniles con algunos pocos mayores que cargan sobre si el peso del partido. Su media cancha es fuerte, con dos experimentados, principalmente su escolta, que generalmente viene d ela banca, pero termina siendo su jugador mas desequilibrante. Y un pivot que si està en una buena noche, te pinta la cara. Las dos veces que se enfrentaron, fue en circunstancias disìmiles a como se veràn las caras ahora: allà, Leandro Portillo jugò a lo Portillo y los volviò locos, para deleite de los hinchas funebreros que se acercaron hasta allì  (ni quiero imaginar lo que serà la caravana de hinchas nuestros si hay posibilidades de ascender de visitante...). En la revancha, ya estaban los dos clasificados a la siguiente instancia, por eso la carga emocional era mucho menor a la que serà ahora, donde uno d elos dos conseguirà el objetivo, y el otro verà postergadas sus ilusiones un año màs. Es una pena, porque si iban por llaves distintas, ambos ascendian, pero bueno, el cruce determinò esto, y habrà entonces que apoyar a estos muchachos que estàn a solo un escalòn del ansiado ascenso. Tiene con què, y cuentan con un plus de jerraquìa anìmica que los pone ante la parada màs importante de los ùltimos cuatro años con la chapa de ser los favoritos. Y no les pesa eso.


Midland: Hernàn Adamoli (10), Adriàn Quiroga (7), Sergio Piquin (6), Adriàn Carmagnola (17), Federico Piquin (8) F.I. Cristian Bernardo (11), Lautaro Quiroga (6), Cristian Guerra (2), Agustìn Di Domènico (7), Gastòn Pàjaro (8), Matìas Lopez (0). DT: Juan Rosa


Parciales: 23-11, 47-33, 68-50, 82-67

1 comentarios:

Anónimo dijo...

grande chicos.!!!!!! se lo merecen....falta poco ustedes pueden ...fuerza...y adelante !!!!!!!